Cuando muchas personas compran un concentrador de oxígeno de segunda mano, generalmente se debe a que es más barato o a que les preocupa el desperdicio que genera al usarlo poco tiempo después de comprar el nuevo. Piensan que mientras funcione, el concentrador de oxígeno de segunda mano...
Comprar un concentrador de oxígeno de segunda mano es más arriesgado de lo que crees
- La concentración de oxígeno es inexacta
A los concentradores de oxígeno de segunda mano les pueden faltar piezas, lo que puede provocar una falla en la función de alarma de concentración de oxígeno o una visualización inexacta de la concentración de oxígeno. Solo un instrumento de medición de oxígeno especializado puede medir una concentración de oxígeno específica y precisa o retrasar la condición del paciente.
- Desinfección incompleta
Por ejemplo, si el usuario directo del concentrador de oxígeno padece enfermedades infecciosas, como tuberculosis, neumonía por micoplasma, neumonía bacteriana, neumonía viral, etc., si la desinfección no es exhaustiva, el concentrador de oxígeno puede convertirse fácilmente en un caldo de cultivo para virus. Los usuarios fueron vulnerables a infecciones al usar concentradores de oxígeno.
- Sin garantía post venta
En circunstancias normales, un concentrador de oxígeno de segunda mano es más económico que uno nuevo, pero el comprador asume el riesgo de una reparación. Si el concentrador se avería, es difícil obtener un tratamiento o reparación posventa oportunos. El costo es mayor y puede ser más caro que comprar un concentrador de oxígeno nuevo.
- La vida útil no está clara
La vida útil de los concentradores de oxígeno de diferentes marcas varía, generalmente entre 2 y 5 años. Si bien es difícil para quienes no son profesionales determinar la antigüedad de un concentrador de oxígeno de segunda mano basándose en sus componentes internos, es fácil que los consumidores compren un concentrador de oxígeno que ha perdido su capacidad para aliviar la picazón o que está a punto de perder su capacidad para producir oxígeno.
Por lo tanto, antes de decidirse a comprar un concentrador de oxígeno de segunda mano, debe evaluar cuidadosamente el estado crediticio del concentrador, las necesidades de salud del usuario y el nivel de riesgo que está dispuesto a asumir, etc. Si es posible, es mejor consultar a profesionales experimentados relevantes para obtener más información de referencia y sugerencias de compra.
Los de segunda mano no son más baratos, pero los nuevos resultan más rentables.
Hora de publicación: 24 de octubre de 2024